12 de noviembre de 2025.
Buenas tardes y Gracias por decir sí a la justicia del futuro.
Permítanme, en primer lugar, saludar y agradecer la presencia del Ciudadano Presidente Constitucional de la República, Luis Abinader.
Su presencia hoy aquí reafirma el compromiso nacional con una justicia centrada en las personas, moderna, cercana y confiable.
Una justicia que fortalece nuestra democracia y sostiene la esperanza de un país más justo para todos.
Saludo también a las Autoridades Constitucionales de la Nacion, Magistrados y MAgistradas del Poder Judicial, Cuerpo Diplomatico y Organismos Internacionales y a todos los presentes.
Gracias por estar aqui, gracias por ser parte de este proceso y por decir “sí” a la justicia del futuro.
Este encuentro es una expresión de confianza y un acto de fe en la capacidad del país de transformar su destino con justicia, integridad y esperanza.
La justicia es la dignidad viva de cada persona,
el punto donde la ley se encuentra con la vida.
En los últimos años, la República Dominicana ha emprendido un camino firme hacia la transformación de su sistema de justicia, con un objetivo claro: poner a las personas en el centro.
Porque una justicia centrada en las personas es, por definición, una justicia oportuna, accesible y confiable.
Desde el año 2020 hemos ejecutado con disciplina el Plan Visión Justicia 20/24 en ese momento unas voces dijeron que algunas metas eran imposibles y otros que eran retos inalcanzables.
Sin embargo, creímos y trabajamos juntos, con disciplina, y sobre todo,
con compromiso.
Incluso afrontamos una pandemia, eso sí que no estaba en ningún plan.
Pero nos hizo trabajar más unidos. Nos enseñó a demostrar nuestra resiliencia,
¡Y la justicia dominicana no se detuvo, avanzó!
Fue el comienzo de una etapa de modernización profunda, que sentó las bases de la transformation estructural.
Hoy, los resultados de
esa transformación son visibles.
Y muchas de las metas que parecían imposibles, son realidad.
Eliminamos la mora estructural en la Suprema Corte de Justicia, cerrando más de 40 años de retardo acumulado.
Más del 80% de los tribunales del país están al día.
El 100% de los documentos judiciales son digitales. Más de 25 mil usuarios tramitan y consultan sus expedientes, sin necesidad de trasladarse a una sede judicial, lo hacen de forma virtual a través del Portal
de Acceso Digital.
Todas las decisiones de los tribunales están disponibles en línea, a través de la Juriteca de la Escuela Nacional de a Judicatura.
En el Registro Inmobiliario, el 100% de los trámites ya se realizan de manera digital.
Estos resultados son reales, tangibles, están llegando a la gente y, además, han sido reconocidos internacionalmente.
En octubre de este año, la República Dominicana logró el mayor avance mundial en el Índice de Estado de Derecho del World Justice Project, subiendo 11 posiciones a nivel global, alcanzando su nivel más alto en los últimos 10 años.
Además, desde el año 2019, según el Latinobarómetro 2024, se han duplicado los niveles de confianza ciudadana en el sistema
de justicia dominicano.
Estos logros confirman que contamos con la capacidad, la experiencia y la solvencia moral para cumplir los compromisos que asumimos, con responsabilidad y seriedad.
Sin embargo, la tarea de mejorar la justicia no termina con las metas alcanzadas, es un camino que continúa y se perfecciona pemanentemente.
Por eso, ha llegado el momento de iniciar una nueva etapa.
Para sostener los avances y consolidar la justicia a
la que aspiramos como nación, presentamos hoy el Plan Justicia del Futuro 2034.
Una hoja de ruta hacia
un sistema judicial más humano, más ágil, y más transparente.
Su construcción, como saben, fue un proceso amplio y plural, que convocó a 3,000 personas de todos los sectores de la vida nacional.
La gran mayoria de los aquí presentes, construyeron este plan, jueces y juezas, servidores judiciales, representantes de los poderes públicos, universidades, gremios, empresarios, partidos, organizaciones sociales y organismos internacionales.
Todos se sentaron a una misma mesa, movidos por un propósito común:
Una República Dominicana más justa, más próspera y más confiable.
Otra vez les digo, a cada uno de ustedes,
¡Gracias!
Gracias por construir todos juntos Y por decir “si” a la justicia del futuro.
El Plan Justicia del Futuro 2034 se elaboró bajo la metodología de planificación por escenarios, una herramienta utilizada en países como Sudáfrica y Colombia, en momentos
de profunda crisis.
Sin embargo, en el caso dominicano este metodo se ha implementado desde la estabilidad democrática.
Somos el primer país que lo aplica para transformar su sistema de justicia.
Porque planificar con visión a largo plazo no es un ejercicio técnico. Es un acto ético, institucional y estratégico.
Un acto de esperanza.
Es anticipar los desafíos, abrir espacios
de diálogo y prepararnos para servir mejor, con transparencia y empatía.
El futuro de la justicia ya lo estamos construyendo,
Con método.
Con mérito. Y con valores.
Con los valores de
ustedes, y de los que
se irán sumando.
Y sí, cuando vean los detalles de este plan, se darán cuenta de que sigue en buena parte la línea de las transformaciones que ya están en marcha.
En algunos casos las profundiza,
en otros las reconduce.
Porque no partimos de cero.
Por tanto, esto no se trata de reinventar la rueda, pero sí de mantenerla girando en la dirección correcta, de manera que sigamos avanzando y podamos alcanzar nuevas metas.
La innovación y las acciones que conlleva este plan, van más allá de la modernización institucional.
Porque encarnan una responsabilidad ética y filosófica, pues en su uso descansa el cumplimiento del rol judicial ante la sociedad.
El propósito de este
plan es claro:
Eliminar el retardo judicial en el 100% de los tribunales.
Derribar las barreras geográficas, económicas y culturales.
Garantizar transparencia y rendición de cuentas.
Escuchar a la ciudadanía.
Y asegurar que cada persona, especialmente
las más vulnerables, pueda acceder fácil, rápido y con confianza en la justicia.
Una justicia que incluye, Que acerca.
Que inspira respeto y confianza.
Una justicia que se viva, se sienta y se comprenda.
Mirar hacia 2034 no es imaginar un tiempo lejano. Es comprometerse con el presente.
Cada decisión, cada innovación, cada reforma que emprendemos hoy, fortalece la democracia y consolida nuestro Estado Social y Democrático de Derecho.
Por eso este plan no impone una visión.
Mas bien convoca a una conversación permanente.
Es un mapa para la
acción y un espejo de nuestra madurez institucional.
Su fuerza reside en el equilibrio entre los logros que persigue y los valores que lo sustentan:
Servir con integridad. Actuar con responsabilidad.
Ejercer con respeto y empatía.
Esas son las virtudes que dan sentido a nuestra democracia, y que deben guiar el trabajo de cada juez,de cada servidora y servidor judicial.
En un mundo donde el Estado de Derecho retrocede, La República Dominicana avanza.
El futuro de la justicia no pertenece a una gestión,
ni a un poder, ni a un grupo.
Pertenece a nuestras niñas y niños,
! ellos son el futuro!
Pertenece a toda la sociedad dominicana.
Hoy con este plan, ya tenemos claras nuestras metas de los próximos 10 años, créanme:
las alcanzaremos.
Lo seguiremos haciendo
con nuestra disciplina institucional, nuestra voluntad de servir con integridad, y nuestra esperanza en una República Dominicana más justa, más libre y más humana.
A cada persona que está aquí hoy, a cada persona que forma parte del sistema de justicia, y a cada ciudadano, les digo: ¡Este plan es suyo!
Sigamos construyendo juntos la justicia del futuro.
Una justicia al día, centrada en las personas, garante de la dignidad, la libertad y la igualdad.
En nombre de la República,
y por la convivencia democrática.
Lo haremos.
Muchas gracias


