La violencia contra las mujeres es una manifestación de las relaciones de poder históricamente desiguales entre hombres y mujeres, que han conducido a la discriminación contra la mujer y a la interposición de obstáculos contra su pleno desarrollo. La violencia de género incluye todo acto de maltrato físico o sicológico, como las agresiones a la libertad sexual, las amenazas, las coacciones o la privación arbitraria de libertad por razón de género. Los episodios de violencia doméstica e intrafamiliar y de género, en los últimos años a nivel global, son una hemorragia que obligan a definir un reenfoque de la problemática, haciendo efectiva la respuesta de todos los entes estatales que intervienen a lo largo de todo el proceso penal.
Es por ello que el Consejo del Poder Judicial, a través de su Comisión para la Igualdad de Género, ha diseñado la “Guía de buenas prácticas para el manejo de casos de violencia doméstica e intrafamiliar y de género para jueces, juezas y servidores judiciales”, para el manejo eficaz de las distintas etapas del proceso penal, con la finalidad de que los conflictos sociales se resuelvan garantizando los derechos fundamentales de las partes involucradas, la integridad de la víctima y su entorno, en el menor tiempo posible, evitando así la revictimización.
Con la Guía de Buenas Prácticas, también se busca establecer las reglas mínimas necesarias para la atención efectiva a los problemas prácticos que se presentan en los casos de violencia doméstica e intrafamiliar y de género, a través de una estructura sencilla, con fácil manejo para jueces, juezas y servidores judiciales del sistema.
La guía es el resultado de un proceso de estudio, análisis y consultas, para determinar cursos de acción ante la situación de los casos de violencia intrafamiliar y de género, que tiene como víctimas no solamente a aquellas que pierden sus vidas, sino a sus hijos e hijas que en muchos de los casos son testigos presenciales de la tragedia.
La Guía trata sobre las reglas de actuación que deben ser observadas desde que la mujer maltratada tiene acceso a la justicia. Aborda las buenas prácticas en el proceso penal (etapa preparatoria, intermedia, de juicio, recursiva y de ejecución penal) para proteger a la víctima de violencia machista.
El Consejo del Poder Judicial ha lanzado además una consulta pública, que acogerá los aportes de líderes y activistas de la equidad de género, de derechos humanos, así como la ciudadanía en general. Para que aporten sus propuestas e ideas sobre medidas y procedimientos para proteger la vida y los derechos de las mujeres.
Con estas acciones el Poder Judicial dominicano busca que la intervención de los operadores jurídicos en estos casos esté acorde con los parámetros internacionales de derechos humanos y específicamente, derechos humanos de las mujeres y su entorno familiar.
Nuestro llamado a jueces y juezas es a que contribuyamos a garantizar los derechos fundamentales de las partes involucradas en las diferentes etapas del proceso penal y hagamos nuestros aportes para frenar los casos de violencia de género que están lacerando a las familias y a la sociedad.
