El pasado 3 de diciembre el Poder Judicial celebró la Audiencia de Juramentación de abogadas y abogados dedicada al Dr. Ramón Antonio “Negro” Veras. En ella prometieron respeto a la Constitución y cumplir con un ejercicio digno, decoroso y ético un total de 1,565 profesionales. Su entrada es una nueva oportunidad para continuar la tarea por una mejor Justicia, más inclusiva y humana.
En la Audiencia virtual de Juramentación hice un llamado a los nuevos profesionales a emular a Negro Veras al iniciar el difícil camino del Derecho, que exige compromiso y entrega.
Su nombre es sinónimo de virtud y trabajo continuo por la justa aplicación del Derecho ante los tribunales de la República.
Invité a los nuevos abogados y abogadas a buscar comprender ese papel ante la justicia y el rol de esta en la sociedad, a ver más allá del presente la posibilidad de su transformación inspirada en la necesidad de legar al futuro inmediato, y a nuestros hijos, una mejor patria. Tomar en cuenta la responsabilidad que conlleva poder influir en la realidad a través de las fuentes del Derecho y rescatar, en este, la dimensión humanista de nuestra misiónante el sistema de justicia.
Negro Veras dedicó buena parte de su carrera al trabajo por la defensa de los presos, los perseguidos y expatriados de la época de la dictadura. En esos difíciles tiempos sufrió violencia física y psicológica pues su trabajo ponía en jaque intereses políticos del poder. Su sacrificio ha dejado marcas en su memoria que lo enaltecen como un dominicano ejemplar.
Valiente y crítico, en su aproximación a la vida profesional y social, Negro Veras ha puesto en alto los valores republicanos. Llevando adelante una vida acorde a sus convicciones y valores se ha ganado el respeto de todas y todos. Mucha gente coincide en considerarlo un hombre solidario, con fe, dignidad y mucho carácter. Su rol activo en distintos procesos de nuestro país lo llevó incluso a poner en riesgo su vida por combatir el autoritarismo.
En ese tenor fue que se determinó dedicar la Juramentación de abogadas y abogados a Negro Veras. Por su trayectoria que dignifica la profesión y que, por décadas, le ha convertido en una columna de la sociedad santiaguera y el país. Su carácter, apego a la ética, militancia ciudadana y ejercicio profesional comprometido lo convierten en un referente de valor y un defensor de la democracia. Su impronta es un testimonio de lucha, sensibilidad y civilidad. Un compromiso con el país, con la integridad y lo bien hecho.
Es valioso reconocer su camino por considerarlo un estandarte, querido y respetado, que no descansa. Un tributo para que cada día haya mejores profesionales del Derecho, servidores judiciales, así como ciudadanos y ciudadanas.