Nuestra meta de 100% acceso a la justicia no solo se mide por la rapidez y eficiencia de los procesos judiciales, sino también por la dignidad y calidad de los espacios donde estos se llevan a cabo.
En un sistema judicial moderno, los espacios físicos son tan importantes como las leyes que rigen el sistema, ya que deben garantizar que todos los ciudadanos, especialmente aquellos en situaciones de vulnerabilidad, puedan acceder a la justicia de manera plena y digna.
Desde el punto de vista de la organización territorial, las edificaciones judiciales dominicanas se construyeron hace décadas de manera dispersa en cada Departamento Judicial.
Esto significa que, para tramitar las gestiones de un mismo caso, un usuario se ve obligado a transitar por diferentes palacios de Justicia, Tribunales y Juzgados de Paz, así como las diferentes jurisdicciones, en diferentes localidades.
En Santo Domingo Este, esta realidad ha sido un desafío constante durante décadas. A pesar de ser la zona con la mayor carga de trabajo judicial en la provincia de Santo Domingo, con aproximadamente 76,000 casos anuales, ha enfrentado durante años una grave deficiencia en su infraestructura judicial.
Esta situación no solo afecta la percepción de la justicia, sino que pone en desventaja a miles de personas, exacerbando las desigualdades en el acceso a la justicia. Algo que no podíamos tolerar.
Por eso, con el apoyo del Poder Ejecutivo, impulsamos la construcción de un nuevo Palacio de Justicia en Santo Domingo Este, que actualmente se encuentra en fase de terminación.
Este proyecto no solo busca remediar las deficiencias actuales, sino establecer un nuevo estándar en el país. La nueva infraestructura, que está en su fase final de construcción, promete transformar el panorama judicial en la región, ofreciendo un espacio moderno, accesible y eficiente, acorde a las necesidades de la población.
El nuevo Palacio de Justicia de Santo Domingo Este ha sido diseñado con un enfoque integral, poniendo a las personas en el centro de los procesos judiciales. Este edificio estará equipado con tecnología de última generación, permitiendo una gestión judicial más rápida y eficiente. Entre las innovaciones se incluyen expedientes electrónicos, firma digital y la posibilidad de realizar audiencias virtuales, lo que facilita el acceso a la justicia sin necesidad de desplazamientos físicos.
Es importante señalar que este modelo de Ciudad Judicial aúna las diversas instituciones del sistema de justicia, (Ministerio Público, Defensa Pública, y Poder Judicial) pero mantiene la necesaria separación entre ellas, para que los usuarios que acudan a una de ellas transiten por un circuito definido, sin necesidad de interactuar con las personas que trabajan o acuden a recibir servicio de las otras. Es por tanto un modelo abierto y diáfano, pero que garantiza la seguridad de todos.
Desde el punto de vista urbanístico, merece la pena señalar que el nuevo Palacio de Justicia será un espacio profundamente integrado con la comunidad local. No solo ofrecerá servicios judiciales de alta calidad, sino que también se convertirá en un punto de acceso a otros servicios públicos y un espacio para actividades culturales y recreativas.
Este enfoque holístico asegura que el Palacio de Justicia no solo sirva para resolver conflictos legales, sino que también funcione como un hub comunitario, fortaleciendo los lazos sociales y fomentando el bienestar de la comunidad.
En el futuro, la prioridad será extender este modelo de Ciudad Judicial a Santo Domingo Oeste y Santo Domingo Norte. Y después de eso a Santiago, San Cristóbal, La Vega y San Pedro de Macorís. Localidades que suman el 80% de la carga judicial del país.
Por eso, la cercana conclusión del Palacio de Justicia de Santo Domingo Este supone algo más que una mejora del servicio para los ciudadanos de su entorno inmediato, serán un ejemplo de la justicia 100% accesible que se irá implantando en todo el país.
Una justicia 100% accesible, garantizando que todos los ciudadanos, especialmente aquellos en condiciones de vulnerabilidad, reciban un trato digno y eficiente.