Hace unos 20 años se iniciaban los esfuerzos que dieron origen al Plan Decenal para el mejoramiento de la educación. A partir de la década de 1990 estamentos del sector privado, universidades, comunidades y ONG desarrollaron grandes esfuerzos, con apoyo de organismos internacionales de cooperación, para mejorar la educación nacional.
Y durante unos años pareció que aquella iniciativa iba a producir los resultados deseados. Sin embargo hoy estamos, otra vez, confrontándonos con diagnósticos que desde diversos ángulos nos indican que si bien la cobertura de la educación básica y media ha mejorado en algunos aspectos, en términos de calidad estamos más que estancados y muy por debajo de los estándares que se consideran imprescindibles para que la educación sea una contribución tanto al desarrollo humano como a la competitividad.
Proponemos, como idea de esta semana, que retomemos el espíritu de los acuerdos, del pacto social que se construyó alrededor del Plan Decenal en sus primeras fases y que produjo una situación de mucho impacto en su momento. Creemos que existen ahora mejores condiciones para relanzar la educación dominicana que las que propiciaron y también que las que de alguna manera dificultaron aquella experiencia.
Tenemos un sector privado más comprometido con el cambio de modelo económico social, las necesidades educativas para el desarrollo humano y la competitividad están más claras, la sociedad civil tiene experiencias más sistemáticas, el Estado dispone de herramientas de análisis, focalización y políticas de desarrollo más coherentes y el tema urge tanto como entonces.
¿Por qué no nos animamos y relanzamos un pacto nacional para renovar y mejorar la calidad de nuestra educación?
Publicada en Santo Domingo, fecha 20 de octubre de 2010, ver publicación en Perspectiva Ciudadana