El pasado 7 de septiembre tuve la oportunidad y el honor de dar apertura al acto que honraba el paso por el Poder Judicial de tres honorables magistrados que fueron electos por el Consejo Nacional de la Magistratura para servir al país ante el Tribunal Superior Electoral. Comparto mis breves palabras al respecto:
En el día de hoy celebramos la trayectoria y el compromiso con nuestro sistema judicial de los magistrados Juan Alfredo Biaggi, Ygnacio Pascual Camacho y Fernando Fernández. Han sabido representar el servicio y la integridad generando grandes aportes a la judicatura, al Derecho y a nuestro país. Su sacrificio diario, en múltiples maneras, ha fortalecido genuinamente la institucionalidad y el desarrollo del Derecho en distintas especialidades.
Por eso es propicia la ocasión para reconocerles y desear que su trayectoria continúe la ruta que hasta ahora han llevado adelante. Así como que su ejemplo de trabajo pueda ser testificado por las siguientes generaciones en beneficio de nuestro país.
El Derecho entendido como entidad viva es la lucha democrática, pone en su centro a la sociedad y a las personas. Los que ejercemos el Derecho, debemos actuar para mejorarlo todos los días con nuestra actuación.Porque cada problema de la sociedad, cada barrera o cada desprotección se corrige con un mayor apego al Derecho. Es necesario comprenderlo como una rutahacia la Justicia, como un testimonio de fe, como una consagración por mejorar la convivencia.
Tienen en sus manos un rol sagrado ante la república, que conlleva la obligación por todos los medios a nuestro alcance de proceder con dignidad, integridad y amor ferviente por el trabajo.
El impulso e impacto de la Justicia en la institucionalidad es una labor diaria que tiene un papel central en la preservación y empuje de la institucionalidad democrática, dada su relación con la concreción del régimen de consecuencias, ante los límites legales constitucionales y la protección de los derechos de las personas.
La impartición de justicia en cualquier ámbito es un apostolado. Una tarea que requiere de juezas, jueces y servidores consagrados a ser mejores todos los días a través del servicio. A hacerlo, a través de un ejercicio honesto, regido en principios, integridad moral y eficiencia. Pero también poniendo especial atención a la dimensión humana y social de su trabajo.
En sus carreras abunda el apego al marco constitucional y en defensa de los principios y prerrogativas básicas que sostienen el Estado de Derecho constitucional. Actuaron y actuarán en nombre de la República, que es un sistema de instituciones y procesos que sostiene la convivencia.
Sus largas trayectorias docentes, trabajo jurisdiccional avalado por escritos y estudios de impacto en el sistema jurídico, decisiones sustentadas en buen Derecho y aportes a la mejora continua de la Justicia, son ejemplo de que el trabajo sacrificado y la formación continua tiene frutos. La calidad humana, profesional y jurídica de los magistrados Juan Alfredo Biaggi Lama, Ygnacio Pascual Camacho Hidalgo y Fernando Fernández Cruz está probada. Hoy queremos honrarles porque honraron a nuestro Poder Judicial con su paso.
El país cuenta con cada uno de ustedes para, con su accionar jurisdiccional y personal, continuar mejorando y perfeccionando la vida democrática y con ello su devenir diario colectivo.
Auguramos mucho éxito en el nuevo reto que tienen ante la República.